Celia esta estudiando en el conservatorio y quería una sesión para su curriculum. No quería nada clásico, quería algo original y natural.
Así que me puse a hacer los deberes. Busqué por internet, busqué el trabajo de otros compañeros, ilustradores… y al final decidí seguir mi instinto y planificar la sesión con dinámicas y juegos acordes a sus gustos y edad.
Cómo sabéis me encanta el campo y los atardeceres, así qué me fui de excursión por la zona sur de Madrid y encontré un campo maravilloso en Alcorcón: amarillo, con la sierra de Madrid de fondo pero a la vez infinito, de esos que tanto me gustan…
Para esta sesión era muy importante que no lloviese, ni hiciese mucha humedad ya que el instrumento es muy delicado y se podría dañar. Así que me pasé toda la semana anterior supervisando el tiempo. Pero llegó el día y la hora de salir de casa y ¡diluviaba!… estaba cayendo el diluvio universal en mi barrio y me dieron ganas de llorar. Sin perder los nervios cogí el móvil y miré el tiempo… ponía sol, pero me parecía tan increíble que llame a mis conocidos que vivían por esa zona para asegurarme. Cuando llegué a Alcorcón… no había caído ni gota.
La primera parte de la sesión fue más informal.
Celia es una chica joven que le encantan la lectura y ver películas. Además le gusta mucho los juegos de mesa y quería que la sesión incluyera algo de eso. Me llevé algunas cartas del dixit inspiradas en música y resultó ser su juego favorito.
Después se cambió de ropa y le propuse diferentes juegos, canciones… para evocar emociones y fotografiar diferentes sentimientos.
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